Descríbete en una palabra.

Hace tiempo escuché una frase que me gustó mucho: “Uno nunca sabrá todo, se debe morir aprendiendo” y es cierto. Jamás podremos saberlo absolutamente todo. Por eso la palabra que me describe es “aprendiz”

Ser aprendiz tiene consecuencias tanto buenas como malas. Buenas porque te capacita ante cualquier dificultad que tengas que atravesar en la vida. Te ayuda a resolver problemas por un conocimiento previo. También te abre puertas y oportunidades que a muy pocos se les presentas. Y malo porque entre más aprendes también te desilusionas. Te das cuenta que muchas cosas no son como tú creías y personas que no son lo que parecen.

Con todo y eso, me gusta ser un aprendiz. Aprendo del Señor Jesús que dijo:

Sean mansos como palomas y astutos como serpientes. (Mateo 10:16)